Los perros también pueden tener alergia al polen

 

Cuando llega la primavera, algunas personas celebran que aumentan las temperaturas, los días son más largos y los árboles florecen. Sin embargo, otras empiezan a sufrir los efectos de la alergia al polen, que produce comezón en los ojos, nariz e incluso en la piel. Eso no solo afecta a humanos, sino que los perros también pueden vivir consecuencias similares.

El polen, sustancia que se encuentra al interior de flores, plantas, pasto y malezas importante en la reproducción y fertilización de las plantas, puede tener contacto directo con perros, en el caso que les guste oler y acercarse a distintas flores o vegetación. Eso, según revelan desde el equipo veterinario de Master Dog, puede producirles alergia.

Si bien todas las razas están expuestas a ese tipo de alergia, existen algunas que son más propensas, como pug, pastor alemán, golden retriever y bulldog francés, entre otros.

Precauciones frente a la alergia al polen en perros

Esta alergia, que afecta principalmente en primavera y se manifiesta en los humanos de manera similar a un resfriado, es decir, congestión, picor e incluso falta de energía, en perros se puede mostrar de maneras variadas.

Los síntomas más habituales son: Irritación en la piel, picor y lágrimas en los ojos, secreciones nasales, estornudos, garganta inflamada, tos y falta de ánimo. Estos se pueden extender durante todo el periodo de la polinización o incluso todo el año.

“Si se percibe este tipo de malestar en un perro, se recomienda acudir a un veterinario. Los médicos pueden definir, a través de un control y exámenes, las causas concretas de su alergia”.

Daniela Soto, médico veterinario, explicó que “si notan que hay un perro con ojos irritados, estornudos y molestia generalizada y coincide con la primavera, podría asociarse a una alergia al polen, pero siempre debe haber un diagnóstico hecho por un veterinario para descartar otros cuadros con sintomatología similar”.

Una vez confirmado el diagnóstico, desde la marca recomiendan “evitar pasear a tu peludo amigo en zonas donde haya mayor presencia de polen. También es de suma importancia limpiarlo después de cada salida, eliminando todo rastro de sustancias alérgenas de su pelaje, patas, hocico, y orejas”.

Soto indicó que lo principal para prevenir la alergia al polen en perros, “es evitar la exposición a zonas con alta cantidad de polen”, poniendo énfasis en épocas donde prevalece, como primavera y verano.